Sant Ferran de ses Roques es el pueblo que se sitúa en el centro de Formentera. A apenas un par de kilómetros de la capital de la isla, Sant Francesc, y en el cruce entre las poblaciones de Sant Francesc, Es Pujols y el Pilar de la Mola, atravesado por la carretera principal que cruza la isla, la PM-820.
A pesar de que pueda parecer que se trata de un pueblo «de paso», Sant Ferran tiene un encanto una personalidad propia muy marcada. En los años 60 la presencia hippie en el pueblo fue notable y la mezcla de personas de diferentes procedencias ha sido una constante. Su bar más emblemático está situado cerca de la iglesia, la Fonda Pepe. Muchos artistas han pasado por San Fernando en las paredes cuelgan muestras de ello. Incluso cuenta la leyenda que artistas como Pink Floyd y Bob Dylan descansaron aquí.
Sant Ferran de ses Roques (fiesta mayor el 30 de mayo) es un pequeño núcleo urbano sin ningún encanto aparente a primera vista. Su orientación es sobre todo turística y comercial. Sin embargo, si nos acercamos hasta aquí descubriremos un ambiente distentido. Es el encanto de los pequeños lugares.
La pequeña igleisa señala ya la diferencia con el resto de las parro-quias de las Pitiusas: es la más moderna (junto con la de Es Cubells, en Ibiza). Fue construida entre 1883 y 1889; además tiene una planta de cruz latina, única entre las iglesias de estas islas, y tejado con doble vertiente, también un caso excepcional. Su fachada es de arenisca vista, con poco encalado y destaca una espadaña en su fachada.

Pero además de la Fonda Pepe, encontramos otros bares en Sant Ferran con mucho encanto en los que salir a cenar o a tomar algo. Encontramos algunas pizzerías y restaurantes de comida mediterránea de buena calidad y a muy buen precio en un ambiente tranquilo.
El ambiente es continuo en las calles del pueblo. Una calle peatonal junto a la iglesia cruza Sant Ferran de Ses Roques. Durante las noches de sábado en verano aquí se instala un inspirador mercadillo artesano y las terrazas se abarrotan con locales y turistas cenando y tomando unas copas.
¿Qué hacer en Sant Ferran?
Aunque el pueblo de San Ferran no ofrece muchas más actividades que descansar en cualquier de sus terrazas, también hay que considerarlo como un excelente lugar para recorrer la isla. Esta población se encuentra en una situación cercana al centro geográfico de Formentera, por lo que podemos aprovechar parar realizar rutas desde aquí para conocer el norte y sur del istmo que separa las principales elevaciones de la isla.
En la base oeste del istmo se alza la torre de defensa del XVIII, llamada torre des Pi des Català. Cerca, porque en Formentera todo está próximo, se levantaron las aún no excesivas urbanizaciones de Vogamarí, Formentera Playa, las Dunas, y más allá, ya en el extremo del istmo, el complejo Maryland-Insotel y el hotel La Mola. Normalmente, estos núcleos son reducidos y sencillos, cuentan con generador eléctrico y desaladoras propias. El istmo tiene unos magníficos arenales en el sur, Es Arenals de Migjorn, donde el baño es posible literalmente en cualquier lugar: basta dejar la carretera principal y aparcar el coche o la bicicleta en un lugar que no invada el arenal ni dañe, la vegetación litoral.

La playa es larga, ancha, cuidada, de arenas finas y claras, con aguas poco profundas y transparentes hasta la delicia y el ensueño (no es ninguna hipérbole). El nudismo es lo habitual desde hace años. Pequeños bosques de sabinas o grandes ejemplares solitarios ofrecen un poco de sombra, en competencia con los diversos y populares chiringuitos que se suceden a lo largo de este tramo de bellísima costa.
Pasado Maryland, a pie por esta costa meridional se halla Es caló des Mort, un lugar encantador que tal vez ya fuera usado como pequeño refugio para embarcaciones en épocas muy antiguas. El castellum de Can Blai, con sus cinco bases de torre rodeando un rectángulo típico de campamento romano, no está lejos (señalizado en la carretera principal). Otra caleta, esta vez en el norte del istmo, recibe el nombre de Es caló de Sant Agustí. Mantiene un espléndido aire pintoresco con escars (casetas varadero de pescadores) típicos pese a algún que otro moderno edificio de apartamentos turísticos.
El norte del istmo que recorremos – tramo conocido como La Tramuntana o Es Carnatge – la costa es algo más irregular, con tramos de roca baja y, en la base occidental, con acantilados calizos que llegan a alcanzar los 50 m de altura: Es recó des forat. La punta Prima es también una zona rocosa y de acantilados donde se refugian y crían aves marinas: pardelas, petreles y gaviotas.
¿Dónde está Sant Ferran de Formentera?
Sant Ferran se encuentra en la carretera que viene de Sant Francesc (2,5 km) hacia La Mola, en el inicio del istmo de aproxi- madamente 8 km que une los dos promontorios extremos de la isla: el cap de Barbaria, desértico y erosionado, y La Mola, rematada por un faro solitario, digno escenario de un relato de Julio Verne.
Este pueblo es uno de los núcleos más céntricos de la isla, tanto por su ubicación geográfica como por sus buenas comunicaciones por carretera. Desde aquí te puedes dirigir en pocos minutos en línea recta hacia Sant Francesc, Es Pujols o Es Caló de Sant Agustí. A pesar de su buena situación, se trata de un pueblo no enfocado al turismo de manera exclusiva, como la cercana población de Es Pujols.